Birmania está francamente lejos, en distancia física y en distancia cultural e histórica. Sin embargo es reconfortante ver cómo para un buen puñado de gentes de todo el mundo esa distancia no es obstáculo para intentar hacerse presente en la lucha de ese pueblo por su libertad.
¿Y yo qué puedo hacer? Es una pregunta que nos hacemos muy amenudo ante situaciones como esta. Seguramente no mucho pero al menos puedes unirte a la campaña internacional Free Burma! Yo ya lo he hecho y como yo otras 5.750 personas hasta la fecha.
¿A qué esperas?