El jueves de la semana pasada tuvimos reunión de la Asamblea Local de EBB de Getxo. Fué la última del «curso», y salvo que ocurra algún imprevisto, decidimos volver a reunirnos en Septiembre. La reunión se centró en evaluar la actividad de la Asamblea en los últimos meses, concretamente desde Semana Santa, que es cuando empezamos a trabajar más o menos en serio en nuestra nueva sede local.
El balance de la actividad ha sido enormemente positivo, ya que se ha cumplido con creces el planteamiento inicial que nos habíamos marcado:
– Hemos celebrado tres reuniones de la Asamblea Local, previas al Pleno municipal, y en las que hemos debatido diversas custiones de actualidad política (La crónia de la anterior está aquí)
– Hemos celebrado 6 charlas, con una participación total de unas 175 personas, y sobre temas muy diversos como el Proceso de Paz (Oskar Matute, Parlamentario de EBB), Mujer y República (Llum Quiñonero, escritora), Ley de Dependencia (Fernando Consuegra, Viceconsejero de Asuntos Sociales del GV), Ley del Suelo (Javier Dean, Viceconsejero de Vivienda del GV), el Ensanche de Getxo (Iñaki Urkiza, Concejal de EBB en Getxo), el papel del nuevo Lokarri (Paul Ríos, Coordinador de Lokarri)
– Hemos puesto en marcha los Equipos de Trabajo de Organización de la Sede y el Equipo Municipal, que han mantenido dos reuniones cada uno.
– Hemos hecho un pequeño curso de iniciación a los blogs con la participación de 6 personas.
– Hemos tenido en el local dos exposiciones fotográficas, una sobre el Sahara y otra sobre el Ensanche de Getxo.
– En cuanto a comunicación externa, nuestra presencia se ha centrado en las noticias provinientes del Grupo Municipal, en la cartelería que se ha colocado para cada charla (más de 100 carteles en cada ocasión), en el Ezkerti monográfico que se remitió a toda la población de Getxo, y en el blog Getxo Gorria, (que no es propiamente de la Asamblea, pero está getionado por militantes y simpatizantes) que ya va por las 21.000 visitas y 300 post publicados.
Como siempre, el punto débil de todo esto es que hay poca gente haciendo demasiadas cosas, y es necesaria una mayor implicación de todo el mundo. En fin, el pan nuestro de cada día en cualquier organización. En todo caso, acabamos el curso con buenas sensaciones, y pensando ya en el próximo septiembre.