En estos tiempos es muy reconfortante encontrarse con personas que están dispuestas a hacer una «quijotada» para echar una mano a quienes más lo necesitan.
Oskar de Hitzen Leizean Kulunkatzen tiene uno de esos Quijotes entre sus amigos: se llama Iñaki Padín y ha decidido correr los 757 kilómetros que separan Roncesvalles de Santiago de Compostela para recaudar fondos para Aldeas Infantiles. Bravo por Iñaki y por todos sus amigos que le están ayundando a hacer realidad esa genial iniciativa.
Todos los detalles los tenéis en este post de Hitzen Leizean Kulunkatzen
(La foto es de _guu_)
La foto es fantástica, y la idea la verdad, audad y valiente, sí, muy de Don Quijote.
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Joe Pablo, muchas gracias de verdad. Estas palabras seguro que dan alas a Padín. AL final no va a correr sino volar. Un abrazo.
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Muchas gracias por esas palabras la verdad q a uno le ayudan mucho y gracias por haceros eco del proyecto GRACIAS!!
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