Me encanta Punset por lo que cuenta y por su pinta de científico loco y despistado… pero hoy se le ha ido un poco la pinza.

Atentos a la «perla» que ha largado en su blog:

«Es fascinante descubrir que el cerebro nació, precisamente, para permitir a las larvas de los tunicados encontrar el lugar adecuado donde iban a fijar su residencia en su etapa de adultos. Aquel antecesor de nuestro cerebro les permitió orientarse en el espacio para vivir una vida adulta sin moverse. Una vez instalados en la seguridad del lugar elegido, absorbían su propio cerebro porque ya no lo necesitaban.

Mucha gente y, sobre todo, muchos funcionarios se comportan de forma similar a los tunicados. Una vez instalados en la seguridad, se diría que absorben su cerebro y dejan de pensar en otras posibilidades de innovar. Esta actitud es peligrosa para ellos mismos y para el colectivo en el que están insertados.«

Nunca imaginé que el bueno de Punset cayera en el topicazo del «funionata» pero ya veis, todo el mundo «peca» alguna vez.

Al principio de los tiempos de este blog escribí un post que viene muy a cuento de esta cuestión y por si mis palabras no fueran suficientemente ilustrativas, ahí tiene a Alorza y a Iñaki a quienes jamas se me ocurriría comparar con los tunicados (nunca les he visto con túnica, y sólo de pensarlo me entran escalocalientes :-))